Fue conocido en vida
por su bondad, rectitud y fervorosa dedicación a aliviar el
sufrimiento humano. Hijo de Benigno Hernández Manzaneda y de Josefa
Antonia Cisneros Monsilla, realizó los estudios de primaria en
Trujillo hasta los 13 años de edad cuando se mudó a Caracas. Fue un
estudiante sobresaliente y se graduó de bachiller en filosofía en
1884. Ingresa en la Universidad Central, donde obtiene el título de
Médico el 28 de junio de 1888. Cuando se disponía a ejercer la
profesión en Caracas, gracias a una beca, viaja a Europa para
estudiar en París, algunas materias de las que aquí no se tenía
gran conocimiento. Fue así como José Gregorio se preparó con
profundidad en las áreas de: Microbiología, Histología Normal,
Patología, Bacteriología y Fisiología Experimental. A su regreso
de Francia fue nombrado profesor de la primera Cátedra de
Bacteriología en América del Sur. Se dedicó a la docencia, el
ejercicio profesional y a la práctica religiosa. Por esta razón,
fue profesor desde 1891 hasta 1916. Se distinguió por su fe
inquebrantable, su castidad perfecta, su humildad y sencillez
profunda, su excelencia profesional, su tierna devoción a la Virgen,
y su gran amor a Dios y al prójimo. En dos oportunidades quiso
hacerse sacerdote, pero su condición física resultó su mayor
impedimento.Entre las publicaciones científicas se encuentran
"Elementos de Bacteriología" (1906), "Sobre la Angina
de Pecho de Naturaleza Palúdica" y en 1912 publica "Elementos
de Filosofía" El 29 de Junio de 1919 mientras llevaba
medicinas a un enfermo necesitado fue atropellado por un carro en la
zona de la Pastora. Los venezolanos lo veneran por sus virtudes como
médico y por su vocación religiosa. Por esta razón, desde hace
varios años se le atribuyen varios milagros y curaciones, tanto es
así que en 1949 el Vaticano inicia su investigación y en 1986 le
asignan la jerarquía de "Venerable" -uno de los pasos en
el proceso de beatificación según los parámetros de la Iglesia
Católica-. Sus restos se encuentran en el Templo de la parroquia La
Candelaria, después de estar por mucho tiempo en el Cementerio
General del Sur. Era la tumba más visitada de dicho cementerio.
FACILITADORA:
MARYSOL QUINTERO